
El bruxismo infantil: Diferencias clave con el bruxismo en adultos
El bruxismo, definido como el rechinamiento o apretamiento involuntario de los dientes, es una condición que afecta tanto a niños como a adultos. Sin embargo, existen diferencias significativas entre el bruxismo infantil y el bruxismo en adultos, las cuales es importante comprender para brindar un tratamiento y manejo adecuados.
Características del bruxismo en niños
El bruxismo es una condición relativamente común en la población infantil, con una prevalencia estimada entre el 14% y el 40% en niños. Las causas más comunes del bruxismo en niños incluyen factores como el estrés, la ansiedad, los trastornos del sueño, el reflujo, dieta alta en azúcar refinada y exposición a pantallas.
Los síntomas y signos del bruxismo en niños suelen ser diferentes a los observados en adultos. Los niños con bruxismo a menudo presentan dificultades académicas, sociales y de autorregulación de emociones, debido a la interrupción del sueño mediante micro despertares, lo cual está relacionado con menores conexiones neuronales al hipocampo y también debido a alteraciones en los niveles de dopamina y serotonina, neurotransmisores involucrados en el estado anímico y la motivación.
Bruxismo en adultos: Diferencias clave
En comparación con el bruxismo infantil, el bruxismo en adultos suele estar más asociado a factores de riesgo como el estrés, la ansiedad, el consumo de alcohol y cafeína, trastornos hormonales y del sueño. Además, los adultos con bruxismo a menudo presentan síntomas como somnolencia, disminución de reflejos, dolor muscular y articular, y problemas de sueño más intensos.
Es importante destacar que el bruxismo en adultos también puede tener consecuencias neurológicas, como la aparición de dolores de cabeza y migrañas y hay estudios que sugieren cierta relación con enfermedades cardiovasculares.
Diagnóstico y evaluación
La detección temprana del bruxismo en niños es fundamental para prevenir complicaciones y brindar un tratamiento adecuado. Los odontólogos y especialistas en odontopediatría desempeñan un papel crucial en la identificación de los signos y síntomas del bruxismo infantil, así como en la evaluación de su impacto en el desarrollo del niño.
Tratamiento y manejo
El manejo del bruxismo en niños requiere un enfoque multidisciplinario que involucre a odontólogos, gastros, otorrinos, neurólogos, psicólogos y otros profesionales de la salud. Las estrategias terapéuticas estarán muy relacionadas con el origen del bruxismo. Como odontólogos podemos aportar enormemente en el manejo de vías aéreas, consejería en dieta y gestión de pantallas
Prevención y educación
La prevención y la educación desempeñan un papel fundamental en el abordaje del bruxismo infantil. Es importante que los padres y cuidadores estén informados sobre los signos y síntomas del bruxismo, así como sobre las estrategias para promover hábitos saludables y reducir los factores de riesgo. Además, el seguimiento odontológico regular es esencial para la detección temprana y el manejo adecuado del bruxismo en niños.
Conclusión
El bruxismo en niños presenta características y diferencias significativas en comparación con el bruxismo en adultos. Comprender estas diferencias es fundamental para brindar un tratamiento y manejo adecuados, y así prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida de los pacientes pediátricos. La colaboración entre odontólogos y otros profesionales de la salud es clave para abordar de manera integral esta condición en la población infantil.